SOY UN VAGO

He de reconocerlo: soy un vago. Tengo el blog abandonado, a ver si me pongo las pilas y escribo más a menudo. Aunque sólo sea del tiempo.

Si por lo menos tuviera la excusa de que estoy muy ocupado porque hay mucha actividad en esta empresa, o porque estoy buscando un trabajo nuevo, o porque me estoy dedicando a hacer cosas de provecho.

Pero no, últimamente todo se reduce a ir de casa al trabajo y del trabajo a casa, pasando de vez en cuando por el gimnasio y por casa del mandarino. ¿Me estaré convirtiendo en una persona sin inquietudes? Espero que no.

Me puede la rutina. A ver si esta noche, que es Halloween, noche de difuntos y de akelarres, me encuentro con un hombre lobo como Scott Speedman. Así tendría algo interesante que contar.



Un beso, anónimo lector.

Mitomanía

Me he dado cuenta de que, en mi pérfil, el primer título que figura en mi lista de películas favoritas es "Rebelde sin causa". Lo curioso es que nunca la he visto entera.

Era un día cualquiera de mi adolescencia. Estaba solo en casa, al mediodía. Mi madre había grabado hacia tiempo esa película en una cinta de video en la que quedaba espacio libre para grabar más cosas. No me acuerdo por qué, pero la cinta estaba en el aparato y, mientras rebobinaba en busca de otra cosa, vi la escena en la que los chicos van al Planetario y Sal Mineo se asusta con la proyección. James Dean le saca de debajo de los asientos, tranquilizándole. Y de repente, la película me atrapó. Como muy pocas veces me ha pasado con otras películas, sentí que los conflictos de esos personajes eran los míos, que me estaban hablando de tú a tú: la sensación de ser diferente, de no adaptarse al entorno, de no poder relacionarse con los padres, de admirar y adorar a otro compañero, de percibir el mundo cotidiando como una lucha diaria... Todo eso también me estaba pasando a mí en esa etapa de mi vida.

James Dean es mucho más que un icono con el que decorar carpetas. Esta foto me fascina.



Un beso, anónimo lector.

ALERGIA AL OTOÑO

Estos días he estado de bajón, aunque parece que ya me estoy recuperando. El trabajo ha estado especialmente tedioso esta última semana, mis compañeros me resultan cada vez más cansino y, por si fuera poco, he tenido la nariz completamente taponada, con lo que, cada vez que hablaba, tenía la sensación de llevarme el título de "Mister Gangoso of the year". Y es que parece que, debido a la sequía y a lo sucia que está la atmósfera, las alergias de tipo primaveral van a reproducirse en otoño. ¡Lo que me faltaba!

Por lo general, el otoño me gusta, pero este año estoy echando de menos mis vacaciones de verano en Estambul. Y no me apetece nada que empiece a hacer frío, de que cambien la hora, de que al salir del trabajo sea de noche.

Trataré de levantarme el ánimo. Quizás con la serie "Grey´s anatomy". Sale Patrick Dempsey, que ha ganado mucho con los años desde sus pelis de los ochenta.



Un beso, anónimo lector.

Esos ojos negros

Lo que más me atrae de una persona son sus ojos... o más bien, su forma de mirar. Hay miradas que no miran, ojos opacos que parecen no ver nada, y hay miradas que atraviesan el alma. Esto es algo natural, no creo que se pueda aprender a mirar, no hay nada peor que una mirada forzada.

Esta mañana, mientras iba a trabajar, me he acordado de un viejo amigo a quien hace años que no veo, una de estas personas que entran en un momento dado en nuestras vidas y con las que, sin saber bien como, terminamos perdiendo el contacto. Sin embargo, de vez en cuando me acuerdo de él. Tenía los ojos azules más impresionantes que he visto nunca (y llevaba perilla, algo que, no sé por qué, siempre me ha resultado terriblemente atractivo). También tenía novia. Supongo que a cada gay le corresponden dos o tres buenos amigos heterosexuales inalcanzables.

Mi mandarino tiene los ojos pequeños, pero intensamente negros. Él es de los que sabe mirar. Nadie me ha mirado como él.

Un beso, anónimo lector.

ESOS GAVILANES...

Sí, Alessandro tiene razón, James Blunt no es demasiado guapo. O por lo menos, yo no he encontrado buenas fotos del cantante de moda. No todos los hombres de este blog van a ser meras caras guapas. Algunos sólo tienen talento.

Los que no andan muy sobrados de talento, creo yo, son los protagonistas de "Pasión de Gavilanes". Apenas he visto episodios de la telenovela de moda, pero me ha parecido un producto de muy baja calidad, rozando involuntariamente con la parodia.

Eso sí, para ser un galán de telenovela basta tener unos buenos pectorales o unos ojos impresionantes. No es necesario tener dotes para la interpretación, pero ¿quién necesita método si te llamas Michel Brown?



Un beso, anónimo lector.

Minutos musicales

Hoy no me apetece escribir, así que me limito a hacer una recomendación musical: "Back to Bedlam" de James Blunt. Diez canciones tranquilas que recuerdan tanto a artistas de los sesenta (Donovan o Cat Stevens, por ejemplo) como a cantantes actuales (David Gray o Ryan Adamas). Una voz melancólica, una guitarra acústica y mucho talento.



Un beso, anónimo lector.

ES UNA LATA EL TRABAJAR

Hay veces que uno se despierta y lo que menos le apetece es ir a trabajar. Hoy me hubiera tomado el día libre, me hubiera quedado en la cama, amodorrado junto al mandarino. Después me habría tomado un buen desayuno, un zumo de naranja y unas tostadas con mantequilla y mermelada. Habría salido a dar una vuelta y pasear por la ciudad. Me gusta tener días libres entre semana mientras Madrid sigue con su ritmo de vida habitual, me siento como si estuviera haciendo campana. Por la tarde, a primera hora habría ido al gimnasio, aprovechando que hay menos gente y no tengo que soportar a los cachitas de diseño que, todos los días, después de trabajar, van a lucirse entre pesas y mancuernas.

Porque tienen muy buenos cuerpos, pero van tan repeinados, con sus camisetas de marca, tan pendientes de que les vean, que casi, casi, me dan ganas de decir eso de "ya no quedan hombres de verdad". Pero sí que quedan. Por ejemplo, Clive Owen.



Un beso, anónimo lector.